La zona cercana a la Comisaría Tercera se encuentra en alerta constante debido a una ola de inseguridad que ha llevado a los residentes a expresar su preocupación por la frecuencia de los delitos en la zona, a pesar de la proximidad con la fuerza policial. Vecinos de la calle Santa María de Oro, donde se ubica la comisaría, han denunciado una serie de incidentes delictivos que han afectado su tranquilidad.
Gustavo Pache, uno de los vecinos afectados, expresó su frustración ante la falta de respuesta por parte de las autoridades: «La verdad que estamos un poco asustados los vecinos aquí de la calle Santa María de Oro porque hemos tenido muchos hechos delictivos en estos últimos tiempos y por ahí a nosotros se nos llena de preguntas porque estamos a una cuadra de la seccional 3era y resulta que cada dos o tres días tenemos algo que nos tenemos que lamentar de alguna pérdida de cualquier cosa».
Los residentes también han señalado la rapidez con la que los delincuentes actúan y la aparente impunidad que disfrutan. «A mí me pasó hace una semana atrás que escuché ruido, ingresaron a mi patio. Y bueno, me levanté y se llenó la alarma, llamé a la policía, vinieron», relató Pache.
Antonio Díaz, otro habitante del área, agregó: «Está complicada la cosa acá en la zona. Nosotros estamos reuniéndonos con los vecinos, a ver qué podemos hacer, si conviene la cámara, conviene la alarma o buscar alguna otra alternativa». Díaz destacó el esfuerzo previo de la comunidad para la construcción de la comisaría y lamentó la falta de seguridad a pesar de ello.
Alejandro Pirotta, también residente en la zona, expresó la necesidad de una respuesta efectiva por parte de las autoridades: «Todos los vecinos queremos saber perfectamente hasta dónde podemos llegar en el apoyo. Entonces una vez que nosotros apoyamos también queremos la retribución para tener un cuidado y vivir en paz como corresponde».
