En el centro de una creciente controversia se encuentra Aníbal Lotocki, un médico estético egresado de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), cuyo historial ha estado marcado por denuncias de mala praxis, lesiones graves y acusaciones por parte de pacientes notables. Lotocki, graduado como médico en 1994, ha causado revuelo en la comunidad médica y la sociedad argentina en general debido a su polémico accionar en el campo de la cirugía estética.
Lotocki, a pesar de no ser un cirujano plástico certificado, se ha especializado en procedimientos estéticos y cosméticos. Sus intervenciones han resultado en una serie de denuncias de mala praxis presentadas por diversas personas, incluyendo a celebridades como Pamela Sosa, Gabriela Trenchi, Stefanía Xipolitakis y la reciente fallecida Silvina Luna.
Murió la actriz Silvina Luna a los 43 años
La situación más grave en su historial se presentó en abril de 2021, cuando Lotocki fue imputado por la muerte de Cristian Adolfo Zárate, un paciente que había sido sometido a una intervención quirúrgica en su consultorio. El caso llevó a una investigación más profunda y, posteriormente, Lotocki recibió una condena de cuatro años de prisión por lesiones graves en relación con las denuncias presentadas por Luna, Xipolitakis, Sosa y Trenchi. Además, se le inhabilitó para ejercer la profesión médica durante cinco años.
Recientemente, un giro legal ha llevado la situación de Lotocki a un nuevo nivel de gravedad. El juez Luis Schelgel decidió cambiar la calificación legal del crimen relacionado con la muerte de Zárate, pasando de «homicidio culposo» a «homicidio simple por dolo eventual». Esta modificación implica que, en caso de ser hallado culpable en el juicio, Lotocki podría enfrentar una pena de prisión más larga, entre ocho y veinticinco años.
Aunque el juez no ordenó su prisión preventiva, se impuso a Lotocki la obligación de presentarse en el juzgado cada 15 días. La medida responde a la solicitud del fiscal Pablo Recchini, quien amplió la declaración indagatoria del médico luego de descubrir irregularidades en la clínica estética de Lotocki y evidencias de falta de consideración de antecedentes médicos que representaban un «alto riesgo de muerte» para los pacientes.
No obstante, Lotocki no está reconocido por la Asociación de Cirujanos Plásticos de Argentina ni por otras sociedades médicas relacionadas. A pesar de haber trabajado en diversos consultorios y haber acumulado un historial de intervenciones estéticas, carece de la certificación y respaldo de las principales organizaciones médicas de cirugía plástica del país.
