El acueducto de El Impenetrable se encuentra en su fase final y dentro de un mes ya estará brindando agua potable a los pobladores de Fuerte Esperanza y alrededores.
“Esta obra va a marcar un antes y un después en la realidad de nuestro pueblo, no solo por lo que implica en términos de salud sino por el crecimiento que vamos a tener a nivel productivo y ganadero en nuestra zona”, declaró ante las cámaras de N9 Inés Ortega, intendenta de Fuerte Esperanza.
Entre finales de mayo y principios de junio se estima que la obra esté completada. Según comentó Ortega, la llegada del tanque, que se encontraba frenada en la Aduana, había demorado un poco los trabajos, a lo que se le sumaron las últimas lluvias, que contribuyeron también al retraso de las obras.
Hoy en día, Fuerte Esperanza se abastece principalmente por medio de un pozo de 240 metros de profundidad, de aguas crudas y con fuerte presencia de arsénico. Para el consumo humano, los habitantes cuentan con aljibes en sus propiedades. También existe una planta de osmosis, a donde la gente tiene que concurrir para llevar el agua potable.
Con la llegada del acueducto, los vecinos de Fuerte Esperanza podrán contar con agua potable y segura en sus propias casas, sin recurrir a centros de distribución o depender de las lluvias para llenar los pozos.
La intendenta comenta que el paso próximo sería extender el acueducto a Comandancia Frías, completando así la cobertura del acueducto, que abarcaría de una punta a la otra de la Provincia del Chaco.
