Leandro Zdero, gobernador de Chaco, Argentina, se reunió con el presidente de Paraguay, Santiago Peña, y su vicepresidente, Pedro Alliana, para discutir proyectos colaborativos en seguridad, infraestructura y cultura.
En una jornada histórica para la región, el gobernador de Chaco, Leandro Zdero, se encontró con el presidente paraguayo, Santiago Peña, y su vicepresidente, Pedro Alliana, en la República del Paraguay. La reunión fue un paso significativo hacia la cooperación bilateral, ya que ambas partes avanzaron en proyectos conjuntos destinados a fortalecer la seguridad, mejorar la infraestructura y fomentar la cultura en la región.
El gobernador Zdero expresó su entusiasmo por este encuentro, destacando la importancia de estrechar lazos de fraternidad y trabajar en proyectos que beneficien a ambas naciones. Acompañado por funcionarios clave de su gabinete, Zdero enfatizó la necesidad de abordar conjuntamente los desafíos en materia de seguridad, subrayando que la lucha contra el narcotráfico es una prioridad compartida que requiere una acción coordinada entre las fuerzas provinciales y federales.
En el ámbito de la infraestructura, se discutieron diversos proyectos destinados a impulsar el desarrollo regional, incluyendo la posibilidad de construir un puente que conecte Pilar con Puente Cano en Formosa. Además, se exploraron oportunidades de colaboración en torno al Puerto de Barranqueras y la integración del Puerto Las Palmas en la Hidrovía Paraná-Paraguay, lo que promete fortalecer el comercio y la conectividad en la región
En el aspecto cultural, el gobernador Zdero extendió una invitación a la comunidad paraguaya para participar en la Bienal Internacional de las Esculturas que se celebrará en Resistencia, resaltando la importancia de promover el intercambio cultural entre ambos países.
Los representantes paraguayos demostraron un genuino interés en abordar las preocupaciones compartidas y fomentar la colaboración en áreas clave como la infraestructura, los puertos y la conectividad. Este encuentro marca el inicio de un camino hacia una mayor armonía y cooperación entre Argentina y Paraguay, lo que promete beneficios tangibles para el Chaco, el Norte argentino y la región en su conjunto.
