A casi dos semanas de los incidentes en Misión Nueva Pompeya, a raíz de la desaparición de Salustiano Giménez, la calma pareciera haber vuelto a la pequeña comunidad del Impenetrable, en medio de una causa que aún permanece abierta sin resolución.
Jorge Canteros, procurador general de la Provincia del Chaco, brindó algunos detalles, en diálogo con N9 acerca de la causa por la desaparición de Salustiano Gimenez, que aún no ha podido ser encontrado por los distintos operativos policiales que se llevan a cabo desde hace semanas en la zona.
Canteros cuenta que el joven “desaparece en unas circunstancias que no se pueden acreditar, porque hay gente que dice que desapareció un domingo, y otros dicen que lo vieron el día lunes en Pompeya, en horas de la mañana. La denuncia se hizo lunes o martes, pero hay otros testimonios que lo vieron el lunes”.
Según relató a N9, existe la versión de que Salustiano se habría llevado un animal ajeno de una propiedad, y a partir de allí surge la vinculación con el único imputado en la causa, de apellido Romero, que en estos momentos se encuentra alojado en la ciudad de Castelli, por razones de seguridad.
El sábado 4 pasado, cuando se desencadenaron los disturbios por parte de la comunidad wichí, cuenta Canteros que se había organizado la búsqueda con equipo y perros, a cargo Diego Maidana, quien comandaba el operativo. Aparentemente, en determinado momento, los perros se dirigieron hacia un lugar, “que a los familiares y amigos de Salustiano no les gustó… y eso dio motivo a esos tremendos desmanes que se produjeron en Pompeya”, donde decenas de personas asaltaron e incendiaron la comisaría, la municipalidad y el juzgado multifueros de la localidad.
En defensa de la justicia, el procurador general sostiene que el fiscal Morales Gordón, sobre quien pesan duros cuestionamientos, hizo lugar a cada una de las medidas que se solicitaron desde la Secretaría de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo de la provincia, ya que dichas medidas apuntaban a esclarecer el hecho.
Por último manifestó su deseo de que todo vuelva a la tranquilidad y afirmó que se está trabajando fuertemente, con testimonios, cruces de llamadas telefónicas y demás elementos probatorios para esclarecer la desaparición de Salustiano, que espera poder encontrar con vida. Para Canteros se trata de una deuda pendiente de parte de la justicia hacia la comunidad de Pompeya, que todavía sigue buscando a Hernán Andrada, otro joven desaparecido desde finales de 2020 y que, junto a Salustiano, ya suman dos desapariciones en esta comunidad de El Impenetrable.
