El miércoles pasado, un hombre cuyo celular había sido robado el día anterior terminó siendo denunciado por los propios ladrones por posesión y distribución de pornografía infantil. Sin embargo, una de las menores identificadas resultó ser vecina del hombre de 45 años, que se encuentra actualmente detenido, y a quien ahora se investiga no solo por posesión y distribución de este material sino por posible abuso infantil.
El hecho, comenta el subcomisario Eduardo Escobar, de la División de Cibercrimen, tuvo lugar la mañana del miércoles pasado, cuando la ministra de Seguridad y Justicia, Gloria Zalazar, comenzó a recibir mensajes anónimos a través de un grupo de WhatsApp con imágenes de abuso a dos menores.
A partir de allí, la División de Cibercrimen llevó a cabo la investigación que terminó con el allanamiento de una vivienda del barrio Guiraldes y la detención de un hombre de 45 años, que el día martes había realizado una denuncia por un celular robado.
En la vivienda del sospechosos se secuestró material informático y “prendas de vestir de menores de edad con restos biológicos”, que están siendo peritadas. El propietario de la vivienda prestaba servicio en el marco del programa de salud Expertos. A su grupo de whatsapp es donde se enviaron las imágenes que llegaron hasta la Ministra de Seguridad y Justicia.
En primera instancia se logró establecer que, una de las menores que aparecían en las imágenes era una vecina del hombre de 45 años. El padre de la víctima fue notificado y el Ministerio de Salud se comprometió a proporcionar apoyo y contención a la familia.
De esta manera, lo que en principio fue un simple robo de un celular derivó en una investigación por presunta posesión y distribución de pornografía infantil, y ahora se sospecha de un posible caso de abuso infantil.
El subcomisario Escobar, por último, recordó frente a casos de pornografía infantil, la importancia de realizar inmediatamente la denuncia a la policía y no viralizar ni distribuir el material ilegal. La ley argentina, en su artículo 128 del Código Penal, castiga la distribución y tenencia de este tipo de material. Además, desde 2021, la provincia de Chaco cuenta con la ley 139 bis que sanciona la distribución de material de adultos sin consentimiento.
