La empresa estatal había denunciado el faltante de un vehículo Fiat Cronos perteneciente a su flota. Tras recibir la denuncia, la policía halló el auto en manos del hijo de una empleada que lo utilizaba como propio.
El domingo la policía recibe una denuncia anónima por parte de una empleada de Sameep, señalando que uno de los automóviles de la empresa, un Fiat Cronos de color blanco, no se encontraba presente en el parque automotor de la entidad. La encargada de dicho vehículo sería una tal Andrea Escobar.
La policía inició las investigaciones y lograron averiguar que el automóvil era conducido por un joven de 31 años, empleado del Servicio Penitenciario. Al indagar al sujeto, de apellido Montivero, éste señaló que el vehículo pertenecía a su madre, Andrea Escobar, empleada de Sameep.
Tras esta constatación, el presidente de Sameep presenta una denuncia y se procede al secuestro del automóvil.
La causa, caratulada como “supuesto hurto”, quedó en manos del fiscal Víctor Recio. Sin embargo, no se efectuaron órdenes de detención.
