La Provincia del Chaco viene siendo testigo en los últimos meses de un creciente número de episodios de violencia con arma de fuego en situación de robos, asaltos o disputas. El “gatillo fácil” de los delincuentes provoca cada vez más víctimas con armas que, habitualmente sólo se utilizaban para intimidar y amedrentar y ahora se emplean para herir y matar.
Al respecto, Ariel Acuña, jefe de la Policía del Chaco, afirmó en diálogo con N9: «Nunca hemos tenido un nivel de violencia así, de realmente utilizar el arma y efectuar los disparos directamente hacia las víctimas«.
En la última semana la ciudad de Resistencia tuvo dos episodios resonantes de violencia con arma, uno de los cuales ocurrió en pleno centro de la capital, cuando un delincuente robó una mochila con 800 mil pesos de la recaudación de un comercio e hirió de un disparó en la pierna a su víctima. El otro hecho tuvo lugar en Barranqueras con una modalidad similar: el robo de la recaudación, esta vez de una remisería, y donde fué herido un ex comisario que intervino en el hecho.
Si bien en ambos casos se pudo identificar y detener a los sospechosos con relativa rapidez, Acuña sostiene que lo más importante es trabajar en la prevención del delito: “Lo que se está trabajando, intentamos trabajar siempre, es la parte principal que le compete a la policía, que es la prevención. Tratar de que no ocurra el hecho o rápidamente intervenir en la ocurrencia del hecho”.
En este sentido, el jefe de la Policía del Chaco enfatiza la importancia de la implementación de cámaras de seguridad, tanto por parte de la policía como de los ciudadanos, como herramienta de gran utilidad en la investigación de los delitos. Según Acuña, gracias a esto se puede llevar a cabo un «ciberpatrullaje», que consiste en revisar las grabaciones de las cámaras cercanas al lugar del delito para identificar a los autores y los vehículos utilizados. Aunque esta metodología ha ayudado en las investigaciones, aún persisten desafíos en la cobertura total de todas las áreas y barrios de la provincia.
Por otra parte, Acuña mencionó la importancia de trabajar en conjunto con los vecinos y los foros de seguridad para recopilar información y recibir críticas constructivas que contribuyan a mejorar la labor policial. Sin embargo, reconoció que los delincuentes suelen actuar estratégicamente, evitando áreas con presencia policial y aprovechando situaciones propicias para cometer sus actos delictivos.
En cuanto a las armas de fuego utilizadas por los delincuentes, el comisario Acuña destacó un cambio preocupante en su accionar: «Antes la utilizaban, amenazaban con el arma, efectuaban disparos al aire como para amedrentar. Ahora directamente están efectuando fuego sobre las personas, disparos sobre las personas, causando las lesiones y heridas«. Ante esta situación, el comisario plantea la necesidad de implementar políticas de desarme y control de las armerías, así como investigar cómo las armas llegan tan fácilmente a manos de los delincuentes.
