Con amplio respaldo, la Cámara de Diputados sancionó una norma que limita la publicidad y el patrocinio de apuestas online, protegiendo especialmente a niños y adolescentes
Con 139 votos afirmativos, 36 negativos y 59 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó una ley que establece estrictas restricciones a la publicidad y promoción de los juegos de azar y apuestas en línea. El proyecto apunta a proteger principalmente a niños y adolescentes, grupos especialmente vulnerables a los mensajes normalizadores del juego online. Entre sus medidas más destacadas, la ley prohíbe el uso de influencers y figuras deportivas para promocionar estas plataformas, así como el auspicio de eventos deportivos.
La legislación aborda uno de los principales motores de la ludopatía: la exposición masiva a mensajes publicitarios. El artículo 8º prohíbe bonos de bienvenida, promociones en redes sociales, cartelería en estadios y cualquier tipo de patrocinio en equipos o eventos deportivos. También se elimina la posibilidad de utilizar marcas de apuestas para denominar instalaciones o espacios recreativos. Estas medidas buscan reducir el impacto de un marketing agresivo que, hasta ahora, ha operado casi sin restricciones en medios tradicionales y digitales.
La aprobación de esta norma envía un mensaje contundente: la salud mental de los ciudadanos, especialmente de los más jóvenes, está por encima de los intereses económicos de la industria del juego. Expertos en salud pública han señalado que la normalización de las apuestas como actividad recreativa aumenta el riesgo de adicción en adolescentes, quienes suelen estar más expuestos a campañas en redes sociales y a la influencia de figuras públicas.
El deporte y la cultura también serán alcanzados por la regulación. Se prohíben los auspicios en camisetas, la colocación de cartelería en estadios y la promoción en eventos artísticos. La ley también incluye una medida específica contra la Publicidad No Tradicional (PNT), como menciones en programas de entretenimiento o publicaciones de influencers, limitando una de las estrategias más efectivas de la industria para captar nuevos usuarios.
Aunque la aprobación de esta ley representa un avance significativo, la lucha contra la ludopatía está lejos de terminar. La implementación efectiva de estas restricciones requerirá controles rigurosos por parte del Estado, así como campañas de concientización sobre los riesgos del juego online. Este es un primer paso hacia un cambio cultural que priorice la salud mental y el bienestar de las futuras generaciones.