El sábado por la tarde un grupo de manifestantes tomó la Comisaría de Misión Nueva Pompeya reclamando la libertad de un detenido por la desaparición de Salustiano Giménez quien es buscado desde el 18 de febrero. La situación se volvió cada vez más violenta hasta el punto en que prendieron fuego el Juzgado Multifueros.
Ante ello, el gobierno de la provincia del Chaco, solicitó que las fuerzas de Gendarmería Nacional intervengan en el lugar para terminar con la situación de extrema violencia a la que fue sometida toda la comunidad. Además se ordenó que las fuerzas policiales aledañas se presenten en el lugar para reforzar la presencia de seguridad.


Tras la llegada de las fuerzas el clima se tornó aun más violento. Los manifestantes comenzaron a atacar a los Gendarmes y a los Policías que se vieron acorralados en varias oportunidades. Masivos ataques a ladrillazos sufrieron los efectivos de las fuerzas de seguridad.





Pasadas las 20:00 horas del domingo se logró tranquilizar la situación aunque una tensa calma se apoderó de Misión Nueva Pompeya donde aun la paz no retornó completamente.
