Una poderosa tormenta azotó el viernes los suburbios de Omaha, en Nebraska, causando estragos en cientos de hogares y otras infraestructuras a lo largo de extensos tramos de terrenos agrícolas. Aunque se reportaron algunas lesiones, no se registraron víctimas fatales de inmediato.
El tornado, descrito como uno de los más devastadores en años, se desplazó desde áreas predominantemente rurales hacia los suburbios al noroeste de Omaha, una ciudad con una población de 485.000 habitantes. Incluso áreas remotas, como la pequeña ciudad de Minden en Iowa, ubicada aproximadamente a 48.3 kilómetros al noreste de Omaha, sufrieron daños considerables, según muestran imágenes compartidas en redes sociales.
En el condado de Lancaster, Nebraska, tres personas resultaron heridas cuando el tornado golpeó un edificio industrial, provocando su colapso con 70 personas dentro. Aunque las lesiones no fueron mortales, el impacto fue significativo.
En Elkhorn, un sector de Omaha, numerosas viviendas recién construidas sufrieron daños severos. Residentes como Pat Woods describieron el momento en que el tornado arrasó con su vecindario, dejando un panorama desolador a su paso.
Las autoridades locales destacaron la importancia de las advertencias emitidas, que ayudaron a salvar vidas al permitir que las personas buscaran refugio a tiempo. Sin embargo, el impacto en la región fue considerable, con pérdidas materiales significativas y miles de clientes sin electricidad.
A medida que los equipos de rescate trabajan incansablemente para evaluar los daños y garantizar la seguridad de los residentes, los meteorólogos advierten sobre la posibilidad de nuevos brotes de tormentas severas en la región.
