Durante el mes de febrero, se registró un aumento del 13,3% en el Índice de Salarios, manteniéndose en línea con el incremento del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que alcanzó el 13,2% en el mismo periodo.
Sin embargo, este incremento no fue uniforme entre los distintos sectores. Mientras que el sector privado registrado experimentó un aumento del 14,1%, y el sector público del 15,1%, el sector privado no registrado recibió un aumento significativamente menor, de apenas el 5,7%.
En términos acumulativos, desde diciembre del año anterior, los salarios muestran un aumento del 31,9%, con variaciones notables entre los diferentes sectores: un avance del 36,9% en el sector privado registrado, del 29,0% en el sector público, y del 17,6% en el sector privado no registrado. Sin embargo, estos aumentos no logran equipararse con el aumento de los precios, lo que resulta en una pérdida de poder adquisitivo para ciertos segmentos de la población.
El análisis interanual revela una brecha significativa entre el incremento de los salarios y el aumento del costo de vida. Mientras que el Índice de Salarios creció un 200,4%, la inflación en el mismo periodo alcanzó el 276,2%. Esta disparidad impacta de manera más severa en el sector de trabajo no registrado, cuyos salarios aumentaron solo un 121,5% en el último año.
